jueves, mayo 29, 2008

Mono Carterista


Mono entre rejas por carterista

Ya no te puedes fiar ni de un simpático monito

Mono entre rejas por carterista Un pequeño mono, entrenado por sus dueños para robar carteras, fue capturado y encerrado en un zoo de Bogotá.

El simio fue entrenado por delincuentes que aprovechaban la simpatía que despertaba el animal entre los desprevenidos peatones, según el subcomandante de la policía ambiental, Orlando Patiño.

Mientras la gente acariciaba al mono, éste aprovechaba para sustraer sus carteras. Luego escapaba para entregárselas a sus dueños, quienes lo compensaban con un plátano.

"Él no es consciente, no sabe qué es robar. Una persona lo acostumbró a meter la mano en el bolsillo ajeno y a cambio le dio comida, y él cree que está actuando bien", aseguró Patiño.

El animal será tratado en un programa de rehabilitación y adecuación a su hábitat natural.

"El mono no es un riesgo para nadie", añadió Patiño. Esta nueva modalidad de robo se suma a la de los delincuentes que utilizan perros peligrosos para amenazar a sus víctimas con soltarlo.
BOGOTÁ (AFP)

martes, mayo 13, 2008

Un niño corrige un calculo de la NASA

Un niño corrige un calculo de la NASA




Escrito por curiosidades | 17 Abr, 2008

Se llama Nico Marquardt, tiene trece años y le ha bastado un telescopio del instituto de Astrofísica de Potsdam (AIP) y hacer unos cálculos para dejar en ridículo a la NASA, según ha informado el Potsdamer Neuerster Nachrichten.

Al parecer, Marquard averiguó que la probabilidad de que el asteroide Apophis colisione con la Tierra es de 1 sobre 450, mientras que los expertos de la NASA sostenían que esta se reducía a 1 sobre 45.000.

Los astrofísicos de la NASA han admitido su error ante la Agencia Espacial Europea (ESA) y han confesado que el chico de nacionalidad alemana, estaba en lo cierto.

Para llegar al cálculo correcto, Marquard tuvo en cuenta el riesgo de que Apophis se choque con algunos de los 40.000 satélites que orbitan alrededor de la Tierra antes de llegar a nuestro planeta, en abril de 2029.

Por lo general, los satélites como Apophis recorren unos 3,07 kilómetros por segundo y suelen pasar a una distancia de 35.880 kilómetros del planeta, pero en este caso lo hará a unos 32.500, unos 3.000 menos de lo que es habitual.

Que durante su trayectoria se choque con un satélite podría tener una consecuencia fatal, ya que modificaría su trayectoria y podría provocar que golpeara a la Tierra en su próxima visita, en 2036.

Tanto la Nasa como Marquardt coinciden en que, en caso de colisión con la Tierra, Apophis caería -en forma de gran bola de acero- en el océano Atlántico, causando olas gigantes y destruyendo costas y archipiélago.